Descenso de la violencia en los países avanzados: fantasía, realidad o ilusión estadística.


Diversos informes provenientes de países occidentales industrializados y avanzados, como los EE.UU., Canadá y Holanda, entre otros, se hacen eco de un descenso relevante, desde mediados de los años 90, de la violencia y la delincuencia. Autores como Lalumiere (criminólogo canadiense), Laub, Lewitt , Zimring y Blumstein (criminólogos norteamericanos) destacan esta tendencia suficientemente contrastada para considerarla una realidad social. Estos descensos van desde el 45% (homicidios) hasta el 11% (robos y delitos contra la propiedad) e incluyen descensos “alícuotas” en tasas de victimización dese los años 1991 al menos hasta 2001. Las razones son diversas y a veces sorprendentes: incremento del número de delincuentes encarcelados, cambios en la distribución de la pirámide de edad en la población con un descenso de los jóvenes, incremento de las medidas de seguridad policiales y cambios en las políticas sobre el aborto de los años ’70, entre otras. Quizás una de las hipótesis más interesantes entre las que se han propuesto para explicar este fenómeno es de naturaleza psicológica y tiene que ver con la relación entre los comportamientos violentos y los de riesgo (conducción peligrosa, prácticas sexuales inseguras, abandono escolar precoz, consumo de drogas, etc…). Según parece estas conductas de riesgo también han descendido. Estas conductas covarían con las conductas violentas y delictivas puesto que comparten muchos factores de riesgo de naturaleza psicológica comunes (impulsividad, bajo auto-control, querencia por el riesgo, temeridad, etc…). Numerosos e importantes criminólogos y psicólogos han enfatizado esta estrecha relación entre los comportamientos de riesgo y el delito que permite contrastar la hipótesis del descenso de la violencia y (contingentemente) de las conductas de riesgo.

Un estudio, recientemente publicado por Mishra y Lalumière (2009)* , ha realizado una comparación exhaustiva entre ambos fenómenos, violencia-delincuencia y comportamientos de riesgo, en Canadá y los USA a partir de distintos informes “epidemiológicos” . El resultado es que el abandono escolar precoz, el comportamiento sexual imprudente y los accidentes de tráfico han disminuido una media del 20% (aprox.), pero no el consumo de drogas, que ha aumentado un ligero 2% de media, desde 1991 hasta 2001. Para este período también ha disminuido la delincuencia de forma relevante (la violenta en un 25% y la no-violenta en un 35%). Los autores indican que ante esta realidad deberemos buscar la explicación en el descenso de la prevalencia de los rasgos psicológicos individuales que antes hemos mencionado. Lo proponen pero dejan la respuesta a esta hipótesis abierta y sin resolver aunque sugieren que variables moduladoras como los cambios demográficos, económicos o educativos sean los responsables de tal descenso. Probablemente se noten estos efectos en la personalidad de los jóvenes y, consecuentemente, en el descenso de los comportamientos de riesgo y la delincuencia.

Estos datos son procedentes de culturas no tan diferentes de la nuestra excepto en la secuencia temporal de los sucesos sociales. ¿Está por venir un descenso de estos problemas en España? Habría que contrastar esta realidad en España con nuestros datos criminológicos, socio-sanitarios y comunitarios y ver si se replica esta relación entre comportamientos de riesgo (consumo de drogas, práctica de sexo inseguro, conducción temeraria, etc…) y delincuencia, especialmente entre las cohortes de jóvenes entre 15 y 25 años. Una tarea pendiente para los criminólogos que convendría realizar para planificar las intervenciones preventivas en un futuro inmediato.

(*) Mishra,S. y Lalumière,M. (2009). Is the crime drop of the 1990s in Canada and the USA…Social Science and Medicine. 68:39-48